"Escarabajo", "beetle", "cepillo", "bug", "coccinelle", "buba", "vocho"... Todos son apodos utilizados en diferentes países para referirse a este modelo de "Volkswagen", uno de los coches más fabricados de la historia.
Famoso por otras acciones mucho más oscuras, fue Adolf Hitler quien impulsó su lanzamiento. Hasta ese momento, y debido al alto coste de fabricación, el uso de automóvil estaba reservado para las capas más altas de la sociedad. Hitler quería universalizar ese medio de transporte para las familias alemanas, y para conseguir su objetivo, incentivó y apoyó financieramente al ingeniero austriaco Ferdinand Porsche, que ya había diseñado algún prototipo. Se trataba de fabricar en masa un coche duradero y asequible. Fue así como nacería el primer "Volkswagen", que en alemán significa algo así como "coche del pueblo".
Sin embargo, no sería hasta después de la segunda guerra mundial, con Hitler ya muerto, cuando comenzó la imparable popularización del modelo, llegando a convertirse en un icono en varios países.
En Brasil es conocido como "Fusca", y aunque hace años que dejó de fabricarse, todavía es muy fácil ver alguno. Este estaba aparcado hace algunas semanas en la antecima de la "Pedra Grande", montaña que vigila la ciudad de Atibaia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario